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El juego es la actividad central de niñas y niños y una de las principales experiencias que conforman su identidad

Boletín 182/2019
8 de octubre de 2019

En el marco del 30 aniversario de la proclamación y adopción de la Convención sobre los Derechos de Niñas y Niños, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) inició una serie de actividades para promover la agenda de los derechos de la infancia, a fin de visibilizar avances y pendientes en la materia.

Así lo destacó la Ombudsperson capitalina, Nashieli Ramírez Hernández, durante la Conferencia Magistral “El juego en la primera infancia”, impartida en la sede de este Organismo por el académico de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) Argentina, Adrián Rozengardt.

La Presidenta de la CDHCM recalcó que una de las primeras acciones es la convocatoria del concurso de guiones radiofónicos Derechos al aire: la voz de niñas, niños y adolescentes, que lanzó esta Comisión junto con Radio Educación, a fin de acercar a la niñez (de 6 a 17 años de edad) las formas de hacer radio con la construcción de mensajes sobre sus derechos.

En este contexto, y al destacar la relevancia que tiene el goce en el ejercicio del derecho al descanso, al esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de la edad de niñas, niños y adolescentes, expresado en el Artículo 31 de dicha Convención,  Nashieli Ramírez Hernández explicó que por ello es que la CDHCM organizó  esta Conferencia Magistral.

En su oportunidad, el catedrático Adrián Rozengardt aseguró que “jugar es la actividad central en las primeras etapas de la vida y una de las principales experiencias que conforman nuestra identidad”.

El especialista agregó que jugar es una condición para la socialización. “A través del juego se incorporan normas, valores y costumbres del contexto en el que se desarrollan. Jugar es generar sentido y pertenencia, tanto individual como colectiva; es fundamental a lo largo de toda la vida y universal a todas las culturas. Todas las culturas juegan”, dijo.

El mundo adulto, consideró, es el responsable de abrir la puerta, de construir espacios, de liberar las trabas, de hacer las cosas sólo porque sí, por ejemplo en el juego, para que las y los más pequeños hagan y deshagan con la cultura. “Como educadores y adultos responsables de una parte de los tiempos de niñas y niños tenemos que asumir la tarea de garantizar el espacio del juego”, apuntó.

Manifestó que educadores, maestros y adultos son determinantes para garantizar el devenir lúdico, no para condicionar el juego, lo que sería una contradicción, sino para posibilitarlo, para hacerlo seguro, cálido y cómodo.

Adrián Rozengardt afirmó que las personas adultas son los responsables de garantizar las condiciones espaciales, físicas y simbólicas para garantizar el despliegue de la experiencia lúdica, y que los ambientes físicos de aprendizaje tienen que ser concebidos como un tercer educador, ya que un segundo sería la institución educativa y en primer lugar la familia.

“El juego es el mejor aliado del mundo, porque no defendemos el juego per se, lo defendemos porque es la actividad central de la vida de los niños y las niñas. No es cualquier derecho, es el que abre la puerta no sólo a jugar, sino es el que abre la puerta al cumplimiento al resto de los derechos”, finalizó.

En la Conferencia Magistral “El juego en la primera Infancia”, también asistió el Director General de Administración de la CDHCM, Gerardo Sauri Suárez.

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