Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México
Boletín 213/2014
5 de noviembre de 2014
- Reconocer a defensoras y defensores contribuye a la construcción de una cultura de respeto y promoción de los derechos humanos de las personas en México: Dra. Perla Gómez Gallardo
La violencia contra las mujeres causa innumerables sufrimientos: impide que las mujeres desarrollen sus capacidades, daña a las familias, empobrece a las comunidades, restringe el crecimiento económico y socava el desarrollo nacional, advirtió la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Doctora Perla Gómez Gallardo.
En la entrega del Reconocimiento “Ponciano Arriaga Leija” 2014 a las defensoras de derechos humanos Imelda Marrufo Nava y Martha Sánchez Néstor, subrayó su incansable labor, actividades, vivencias, riesgos enfrentados y anécdotas que acompañan su trabajo, como “Un legado invaluable en la defensa y promoción de los derechos de las mujeres que día a día luchan por no permitir actos de violencia en detrimento de su dignidad”.
Para la CDHDF, agregó, el Reconocimiento es una tradición institucional para las y los defensores en México y que, como Imelda Marrufo y Martha Sánchez, “logran con su lucha tenaz derrumbar muchos muros de una cultura que vulnera, discrimina y violenta los derechos de niñas y mujeres, demostrándonos que nadie puede ni debe limitar el pleno ejercicio de los derechos humanos”.
Al recibir el “Ponciano Arriaga Leija”, Marrufo Nava advirtió a tener cuidado y a no caer en la trampa de las cifras y números, sino a recobrar las historias de las mujeres asesinadas y de los hombres desaparecidos, a no perder sus historias ni el dolor de sus familias, madres, padres e hijos.
Llamó, en un día que dijo, está lleno de simbolismo por el dolor que convoca a tantas personas, a tener cuidado de que en tal escenario se invisibilicen la violencia contra las mujeres y los feminicidios, como cuando las autoridades han declinado investigar el hallazgo de restos y dar certeza sobre las personas desaparecidas en el Valle de Juárez.
Martha Sánchez Néstor se pronunció porque en vísperas de la economía no se pase por encima de los territorios y la autonomía indígenas: “Nunca más un México sin nosotras y nosotros”.
Destacó que su labor, como la de otros y otras defensoras de derechos humanos, no se entendería sin las enseñanzas de mujeres como la Comandanta Ramona y sin el levantamiento zapatista de 1994 y recordó la reciente conmemoración de los asesinatos de Digna Ochoa y Plácido, hace 13 años en el Distrito Federal, y de Rocío Mesino Mesino, hace un año en Guerrero.
En la ceremonia de entrega del Reconocimiento, quien fungió como integrante del Jurado, Marusia López Cruz, de la Red de Consejeras para el Fondo Global para las Mujeres, dijo que tan sólo de 2010 a 2014 han sido asesinadas 31 defensoras por causas relacionadas con su labor en favor de los derechos humanos, por lo que consideró necesaria la protección de las personas que dedican su vida a defender los derechos de las y los demás.
No obstante, insistió en que la labor incansable de quienes han recibido el Reconocimiento “Ponciano Arriaga Leija”, en años anteriores, demuestra que no se debe perder la esperanza para “salir de esta barbarie”.
