miércoles , 18 septiembre 2024

Transcripción de la segunda intervención de la Presidenta de la CDHDF, Nashieli Ramírez Hernández, en la presentación del Protocolo para la Atención Humanitaria de Emergencia a Personas Migrantes y/o Sujetas de Protección Internacional en la Ciudad de México.

Discurso 41/2019
30 de mayo de 2019

Seré muy breve, el video quedó muy bueno, el Protocolo está para que lo revisen. Nancy ya hizo un recorrido sobre las principales cuestiones que abarca el Protocolo. Déjenme nada más compartir lo que serían los grandes retos y las grandes lecciones.

Lo primero es la importancia de la coordinación interinstitucional en todos los niveles, transversal y verticalmente, horizontal y vertical. Ese tipo de procesos no se pueden… en la lógica del Protocolo, en la lógica de atención, tiene que ver con la coordinación. Básicamente lo que hace el Protocolo es esto de la coordinación, que a la mera hora todo el mundo habla, pero no sabemos cómo hacerle. Cosas tan sencillas como que articulen reuniones mañana y tarde, tengan puestos de mando, de quién coordina en el día a día. Las cosas en este tipo de procesos con la población migrante todo el tiempo están marcándote retos, te están marcado respuestas y siempre están emergiendo cosas que no te imaginabas que iban a pasar y pasan. Se tienen que dar esas respuestas. Esa es la primera parte.

Lo otro es la necesidad de que este tipo de Protocolos puedan ser adaptados no nada más a lo que venga y a la movilidad, al cómo se modifican los flujos migratorios y el caminar de las personas, sino también el país y que se puede hacer con esa suma y esa voluntad, que sirva para eso.

Otra parte es los retos. ¿Qué hacemos con la inclusión social? ¿Cómo armamos verdaderamente políticas de inclusión social? Ahí están claves que nos da este Protocolo, estas miradas específicas súper importantes para poder ser exitosos. Sobre todo, el que se puede partir de la lógica de Seguridad Humana en todo momento en este tipo de estrategias.

La criminalización, el miedo a la población, el cerrar y tener albergues cerrados porque según les dan más seguridad, están provocando y provocan un efecto contrario. Naturalmente no son acordes a los altos estándares ni de atención humanitaria ni de derechos humanos. Por lo tanto, tenemos que seguir apostando a eso, porque la lección de esta Ciudad cuando estábamos con el mayor número de población migrante, fue que los problemas de seguridad estaban afuera y no con la población migrante.

Finalmente termino. Estos llamados y el que estemos todos aquí, todas y todes reunidos, hace que tengamos que construir un puente más amplio en términos de ser una mirada no xenofóbica y no racista. Las lecciones que nos dejan y lo que nos ha venido dejando estos grandes flujos en los últimos meses, ha sido la emergencia de una actitud xenofóbica y racista con elementos que en este país y en esta Ciudad no habíamos visto en esas dimensiones. Por lo tanto, este tipo de Protocolo y de miradas tienen que hacer frente, tanto desde el Estado como la sociedad, a un “no”, en términos de que se piense que las y los mexicanos somos eso. Está circulando en redes sociales ya, cosas como esta… de una marcha el 7 de julio contra el Pacto Migratorio, que básicamente es el Pacto Global –y que hay posiciones de migrantes que dicen que se quedó súper cortísimo-, van contra eso. Fotos de que los migrantes viene y nos contagian lepra. ¡Increíble!

Creo que ahí sí, y con eso finalizo, el gran desafío no nada más de este Protocolo sino de las respuestas nacionales y locales a la movilidad y los procesos migratorios, tiene que ser una respuesta clara y contundente enfocada en derechos. Ese sería el mayor llamado y la pertinencia hoy todavía, mucho más que estemos aquí, viendo un trabajo –que como todo es perfectible, pero pensamos que vemos que es un muy buen arranque, para poder elevar los estándares en todo el país.

Finalizaría diciendo. Esto es un ejemplo. Las modalidades de movilidad en todo el mundo nos están diciendo que estos problemas globales tienen que tener una respuesta local. Esto es un ejemplo de cómo una respuesta local, hace frente a un problema global que requiere –como les dijo- de un enfoque de derechos humanos.