Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México
Transcripción 68/2018
24 de octubre de 2018
Pregunta (P): Preguntarle su opinión respecto a esta caravana que usted describía como un éxodo y después ver cómo se va a hacer este “puente humanitario” si se espera la llegada de la caravana este fin de semana a la Ciudad.
Nashieli Ramírez Hernández (NRH): Estamos hablando de que estamos posicionando más bien que es un éxodo o un desplazamiento forzado de migrantes, debido a que las caravanas usualmente que teníamos tenían, digamos, un orden, había una convocatoria precisa, tenías ubicados a los liderazgos, generalmente salían acompañados por organizaciones de apoyo a migrantes y en dimensiones estabas hablando de que las más que habíamos presenciado en el país eran de 1,500, a lo mucho, personas.
Estamos hablando de un éxodo en la medida de las dimensiones de lo que está pasando, de la propia demanda de los compañeros y compañeras centroamericanos que básicamente lo que quieren es salir huyendo de un contexto de vulnerabilidad social y de violencia que los empuja a salir de su territorio. En esa medida tiene que ser catalogada de otra manera y esos son los estándares internacionales, nos están marcando eso.
México firmó el Convenio de Cartagena; ahí está aplicado exactamente este tipo de fenómenos, que más bien si ustedes lo ven nos recuerda mucho estos fenómenos, digamos, de éxodo en Europa, hacia Europa por el Mar Mediterráneo, etcétera. Ese es el tipo de fenómeno al que estamos viendo enfrente.
¿Qué es lo que estamos calculando? Tenemos un grupo de migrantes que ya han sido…, digamos, se han acogido a la oferta de refugio fronterizo y que están ahorita todavía en Unión Hidalgo y ahí más o menos permanecerán. Se aproximan más o menos a los 2 mil que están recibiendo el apoyo en términos gubernamentales en la propia frontera de México con Guatemala.
Tenemos este otro flujo que es este éxodo. Calculamos que van a tardar al menos 10 días, por lo menos, en llegar a la Ciudad de México. ¿A qué se debe esto? A que vienen caminando; que vienen en bloques como oleadas; que no están queriendo por la misma desconfianza, por ejemplo, estar en albergues, sino estar más bien en lugares más amplios. Estamos hablando de un flujo de alrededor de 7 mil gentes, de las cuales calculamos que entre mil 700 y 2 mil son niñas, niños y adolescentes, la mayoría con sus familias, muchos de ellos en primera infancia, aunque algunos están, digamos, haciendo su recorrido solos.
¿De qué se trata éste…? Ahorita por lo menos, en la madrugada del día de hoy, salieron de Huixtla rumbo a Mapastepec, en Chiapas. Son 60 kilómetros más o menos de recorrido, después descansarán en Mapastepec y seguirán a Tonalá; y todavía después de Tonalá van a llegar a otro punto que es la frontera en Arriaga, la frontera entre Chiapas y Oaxaca. De ahí tomarán rumbo al Istmo y también estamos hablando de procesos de caminatas muy lentas. De hecho ellos reposaron entre Tapachula y Mapastepec alrededor de un día completo, porque están muchos, ya nos están reportando, con problemas en los pies, no pueden caminar, con ampollas; más que estamos hablando de que están teniendo más de 30 grados de temperatura y luego lluvias fuertes en la tarde. Estas son condiciones muy adversas para pensar que van a poder llegar antes de 10 días.
P: Ahora, ¿qué están ustedes programando para cuando toda esta gente cruce ya la Ciudad de México?
NRH: Estamos programando cuestiones anteriores a eso. El Gobierno de la Ciudad está promoviendo lo que se llama un “puente humanitario”, y de hecho solicitó a la Comisión que acompañara este puente y nosotros hemos estado haciendo reuniones desde ayer, tanto con organizaciones como con el propio Gobierno para que nos informe cómo está planeando estas brigadas. Ellos están pensando en hacer brigadas de salud, de apoyo de protección a niños y también atención a personas con alta vulnerabilidad, como pueden ser personas mayores, etcétera.
Estamos haciendo una lista inicial que permita ver cuáles son las demandas. ¿Qué va a pasar? Van a ir estas brigadas de la Ciudad de México; van a ir acompañadas por organizaciones; van a ir acompañadas por nosotros, por personal de la Comisión; van a ir acompañadas por esta estrategia, está siendo bienvenida por los organismos internacionales de derechos humanos, como son el Alto Comisionado, el ACNUR, el UNICEF y ONU-Mujeres, en el país. Entonces también vamos a ir acompañando esta parte.
Están con nosotros organizaciones como Sin Fronteras, como Médicos sin Fronteras; estamos convocando igual a la Cruz Roja, porque lo que queremos hacer es un puente. Si esperamos en estos al menos 15 días de caminatas, por como lo están haciéndolo este éxodo, pues la gente aquí va a llegar mucho muy cansada o con niveles de enfermedad muy altos.
Nosotros lo que queremos hacer es apoyar este “puente humanitario” que permita que lleguen en las mejores condiciones. Llegando aquí ese es el segundo momento de organización. Ahí también vamos a estar en conjunto.
Les comunico, por ejemplo, que ahorita ya estamos en contacto igual para lo del “puente humanitario” con las Comisiones estatales; acabamos exactamente de hablar con la Comisión Estatal de Veracruz, haremos lo mismo con Oaxaca y Puebla, vamos a coordinarnos con la Comisión Nacional que también de hecho está incorporada a estas mesas que promovimos desde el día de ayer interinstitucionales, también va a estar la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Sí queremos, digamos, mostrar de este lado básicamente que estamos en una emergencia humanitaria, más allá de criterios políticos o no, que estamos en una emergencia humanitaria y que en esa lógica vamos a operar.
Tenemos información de que buena parte de esta ruta está queriendo llegar hacia la frontera, pero que ven como un primer paso fundamental la Ciudad de México. ¿Por qué la ven como un caso fundamental? Una parte por los medios, porque finalmente la cobertura va a ser mayor y la presencia para sus solicitudes va a ser mayor estando en la Ciudad; porque aquí concentramos igual la mayor operación en términos del Instituto Nacional de Migración y muchos procedimientos que tendrían que tratar y finalmente la Ciudad está dando respuesta a su propia Constitución.
Nosotros reconocemos la movilidad como un derecho humano y reconocemos eso y en esa lógica estamos actuando en esta Ciudad, que además se caracteriza o se pronuncia como una “ciudad santuario” para este tipo de flujos de movilidad humana.
Entonces la Ciudad también se está preparando para eso. Se está preparando para poder, digamos, que cuando lleguen aquí estén con las mínimas condiciones y con sus derechos de integridad física salvaguardada en esta Ciudad el tiempo que estén aquí mientras resuelven seguir adelante.
P: ¿Han hecho algún pronóstico de cuánta de esta gente podría pasar por la Ciudad y qué porcentaje quedarse?
NRH: Todavía no, estamos en eso. Lo que sí pensamos es que van a llegar alrededor de los 7 mil. ¿Qué es lo que está pasando? Hay gente que se está quedando en el camino, unos por cansancio cuando les dicen: “sabes qué, eso te va a costar un mes por lo menos de este ritmo”; otras porque ya nos olvidamos que ya tenemos un fuerte flujo de migración desde hace dos años, de migración centroamericana que se está quedando en el país en diferentes puntos. Entonces muchos también ya con estas redes de apoyo se quedarán no nada más en la Ciudad, se van a quedar en Veracruz, se van a quedar en Oaxaca; pero también se están sumando otros que vienen llegando y que ya no son nada más hondureños, sino también guatemaltecos y salvadoreños que se suben al éxodo. En esa medida pensamos que serán los 7,000 los que llegarán.
P: Finalmente preguntarle, ayer la Comisión Nacional decía que el gobierno federal ha privilegiado la contención a la ayuda humanitaria. ¿Usted también cree esta parte, que las autoridades se han visto rebasadas por la cantidad de gente?
NRH: Totalmente. Tan es así que hablaba yo de dos flujos: estos 7 mil que vienen en la caminata y otros 2 mil que calculan que van a estar, que están ahorita en Unión Hidalgo. Ahorita inicialmente eran 700 en el local de la feria y otros 300 en la estación migratoria. Éstos han ido creciendo con los días porque están dejando pasar como flujos alrededor de 500 al día, pero todos ellos se están acogiendo al ser refugiados en México en el proceso normal. En este proceso normal son procesos individuales. La COMAR (Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados) está ya ahí, está dando, digamos, permisos temporales que lo que va a permitir es que ellos puedan tener una visa de trabajo fronterizo en 45 días.
Ahí está contenido, y si tú me lo preguntas, ahí con todo y que sí está rebasado una ciudad pequeña como puede ser Unión Hidalgo, los esfuerzos gubernamentales e institucionales están metidos ahí.
Por eso nos preocupa la otra parte, por eso estamos hablando de este “puente humanitario”, porque si no logramos, los que están descuidados son todos éstos, que finalmente primero decidieron no quedarse alojados en Unión Hidalgo, no acogerse a eso, porque además están encerrados. Por eso, por ejemplo, hay hasta desconfianza en qué tipo de albergues. Están durmiendo muchos fuera en las plazas para no entrar a lugares cerrados con el miedo de que los vayan a deportar.
¿Entonces por qué queremos y es importante que se coloque como éxodo? Porque eso nos permite colocarnos en que todo este grupo de gentes sean consideradas como refugiadas en un primer inicio, que no necesiten hacer los procesos que están planteados, digamos, regularmente como en Unión Hidalgo y que podamos por lo tanto brindar la ayuda humanitaria necesaria como Estado.
P: ¿Cree que ha habido violación de derechos en lo que llevan de esta caminata por el país?
NRH: Sí la hay, la hay en términos de que tú tienes que asegurar…, nuestras leyes, nuestra propia Constitución enmarca que nosotros tendríamos que estar asegurando los mínimos de protección y salud a estas personas y no se está realizando. Gracias.
