Transcripción 55/2018
28 de agosto de 2018
Pregunta (P): ¿Cuántas quejas tiene registradas por violaciones a derechos humanos de adultos mayores?
Nashieli Ramírez Hernández (NRH): Tenemos 325 que tienen que ver con las tarjetas de adulto mayor. Además, en ruta, porque las tenemos en la recepción de Quejas, tenemos alrededor de 90. Quiere decir que en breve estaremos teniendo casi cerca de 500 quejas que tiene que ver con el apoyo de la tarjeta de adulto mayor.
P: ¿Esas en qué consisten?
NRH: Básicamente que no les están dando el servicio, básicamente en procesos de la misma dinámica de prestación. Tenemos, a pesar de que se dice que es universal, no es real. Hay deficiencias en términos del presupuesto, hay quejas porque no se les puede atender. La otra tiene que ver con los procedimientos, no son equitativos. Por ejemplo, para tener vigente tu servicio en la tarjeta recibes visitas más o menos periódicas. Cuando no estás, o cuando sucedieron dos visitas y no te encontrabas, lo que pasa es que te dan de baja del padrón. Entonces tiene que entrar de nuevo, ahora sí que te vas como en la fila de las tortillas hasta el final porque no hay apartados. Tienes gente que ya estaba recibiendo el apoyo, que no lo recibe de manera inmediata porque seguramente van a pasar dos o tres años para que vuelva a entrar en el registro de su apoyo en la tarjeta. Ese bloque lo tenemos.
¿Qué es lo que estamos haciendo? Por un lado, estamos llevando a cabo las investigaciones, pero también en la lógica de apoyar a las personas. ¿Qué quiere decir esto? Nosotros más que pensar en estar haciendo Recomendaciones al respecto, lo que estamos pensando es como ayudamos a estas casi 500 personas para que vuelvan a tener su servicio en términos de la tarjeta de adulto mayor.
P: ¿Hay una deshumanización hacia los adultos mayores?
NRH: Hay una deshumanización, pero tenemos que verla en contexto. Tenemos apenas 70 años que cambiamos la lógica poblacional a partir de que se descubrió -y se los digo tal cual- la penicilina en este mundo. ¿Eso qué abrió? Abrió la puerta a que en menos de 50 años hayamos pasado de una esperanza de vida de 58 a 60 años, a una esperanza de vida que ya en la Ciudad es rayando el promedio de 80 años. ¿Qué es lo que pasaba? Éramos una sociedad, éramos un mundo en donde había pocas personas mayores, y que una persona mayor era considerada cuando tenía 50 años. Lo que pasa es que como sociedad no hemos ido al ritmo de este cambio. Y entonces de esta cosa romántica de que el viejo tiene la experiencia, el viejo es el que hay que cuidar más en la comunidad, el viejo es el que nos trasmite la sabiduría, pasamos a que ya somos –y me asumo igual- muchos. Entonces la sociedad no ha ido al ritmo de esos cambios, para generar una conciencia de lo que implica ser persona mayor. Hasta en la lógica igualmente de paradigmas. Anteriormente veías a las personas mayores y decías “a los 60 años se acabó su vida”, hoy no es así. A los 60 años empezamos nuestra vida. Entonces requiere por lo tanto una visión de cambio de cultura y de paradigma.
P: ¿De otras violaciones a derechos humanos de personas mayores, maltrato, falta de cuidado…?
NRH: Denuncias de eso no tenemos. Esas generalmente se dan entre particulares. Todavía no vivimos un proceso en este país como en otros en donde hay un total abandono de las personas mayores. Seguimos siendo una sociedad mexicana en la medida de nuestra concepción familiar, de grupo cercano, donde cuidamos. El problema es que sí, en ciudades como ésta, esto está causando problemas y entras a la lucha. Entonces tenemos incidencia alta de maltrato a adultos mayores, generalmente mucha violencia económica. Por un lado, quienes tienen la fortuna de haber sido todavía privilegiados por la seguridad social en este país, luego se ven despojados hasta por sus propios cercanos. Hay otros muchos que no se están viendo privilegiados por la seguridad social y está esta “carga” que sienten las familias alrededor de la manutención, y una manutención cara. Acordémonos que las enfermedades por las que están pasando nuestros adultos mayores son enfermedades crónicas: hipertensión, diabetes, algunos procesos de cáncer, que cuestan mucho dinero. Lo que necesitamos nosotros, y que empujamos en la Comisión, cuando hablamos del Derecho al envejecimiento saludable y activo hablamos de que tendría que haber provisiones del Estado con relación a este tipo de enfermedades que sí cuestan mucho, pero que el Estado tendría que ver cómo protegemos, porque si no la carga de recursos nada más es establecida a la familia, es una carga catastrófica en términos de recursos económicos y que no pueden sostener. En esa medida se generan también violencias que el Estado puede evitar.
P: ¿Sobre los asilos irregulares hay algún tipo de denuncia? ¿A qué dependencia le tocaría…?
NRH: De entrada, al Instituto de Adultos Mayores le tocaría la regularización de estos asilos y albergues. Pero cuidado. Desde la óptica de derechos humanos, nosotros no partimos y no promovemos la institucionalización ni de niños, ni de adultos mayores, ni de personas con discapacidad. Lo que nosotros promovemos –y eso es en el enfoque de derechos- es que tengamos comunidades y familias que protejas a sus niños, a sus personas con discapacidad y a sus adultos mayores.
P: En otro tema Presidenta. En la Secretaría de Seguridad Pública hemos visto varios casos: siembra de droga, agresiones a automovilistas. ¿En esta administración se están viendo más casos que la pasada, están más o menos igual?
NRH: Ahorita está más o menos igual, son procesos de la parte de seguridad. Eso es lo que se está evidenciando en medios. Lo que sí tememos, y cada vez más –eso es importante, es que hay más denuncias ciudadanas, tenemos las cámaras que permiten ir viendo las cosas que van sucediendo. Naturalmente es una agenda que hay que erradicar y hay que seguir, nosotros desde la Comisión y en esos hacemos muchísimo seguimiento, hay que seguir limitando que esto suceda.
P: ¿Hay trabajo con el actual Secretario Raymundo Collins?
NRH: Hay trabajo, en términos de lo que a cada uno le corresponde. Ellos están haciendo su rutina, ellos son los responsables básicamente de la seguridad en la Ciudad. Y nosotros por nuestro lado, somos los que monitoreamos y en el momento en el que la investigación le señalamos si en esta labor hay o no violación a derechos humanos.
P: ¿Pero hay comunicación?
NRH: Constante, la Ciudad está viva. Entonces tenemos comunicación vía las investigaciones, vía las Recomendaciones y tenemos comunicación también en el día a día, porque mucha gente viene aquí y piden servicios y nosotros se los damos.
P: Retomando lo de los asilos. Tengo entendido que se estaba haciendo un monitoreo con la Comisión…
NRH: Nosotros tenemos esa atribución y de hecho lo hacemos de manera más o menos cotidiana, en la medida en la que podemos hacer recorridos. Lo hacemos no nada más en instituciones para adultos mayores, lo hacemos también en instituciones para personas con discapacidad y con niños. Estamos emitiendo también solicitudes a la autoridad en términos de las situaciones y de lo que tendría que estar pasando en esos asilos. Como les dije, yo creo que lo mejor y la agenda que tenemos que recalcar en una visión de derecho es: el principio de la institucionalización es el último principio. Eso no debería de suceder en la primera instancia, sino a la última instancia. Pero que tampoco podemos dejar en las familias todo esto que les decía que son los costos de esta vejez sin seguridad social, eso es muy importante. Finalmente, lo que hay que hacer es fortalecer a las familias y fortalecer a las comunidades para que todas nos hagamos cargo de nuestros niños, de nuestras niñas, de nuestras personas mayores y de nuestras personas con discapacidad.
P: Otro factor es el de las personas en situación de calle…
NRH: Lo que está pasando en esta parte de violencia económica, sobre todo de maltrato, estamos teniendo un incremento significativo de personas mayores en situación de calle que son despojadas de su vivienda, lamentablemente muchas veces por sus familiares.
P: Hubo una queja de las ponentes de que no estaban funcionando los modelos de las instituciones dedicadas a la atención a personas mayores.
NRH: Así es. Es uno de los grandes temas. En eso coincido con las ponentes. Más que pensar que necesitamos tener instituciones ideales, necesitamos tener familias y comunidades ideales.