Boletín 292/2013
23 de agosto de 2013
• Celebran miembros del Jurado, incluido el propio García Ramírez, la excelencia en la preparación de los equipos
• Estudiantes de la Universidad Iberoamericana de Puebla, los ganadores de la justa de litigio estratégico
El Presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis González Placencia, felicitó a las y los estudiantes ganadores de la segunda edición de la Competencia Universitaria Sobre Derechos Humanos “Sergio García Ramírez”, convocada conjuntamente con la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El premio para la Mejor Oradora de la Competencia fue para Pamela Susana Velázquez, estudiante de la Universidad Iberoamericana Campus Puebla; para el Mejor escrito de Víctimas fue para la Universidad Autónoma del Estado de Yucatán; y para el Mejor escrito de Estado fue para Universidad Iberoamericana Campus Puebla.
No obstante, todas y todos quienes participaron y asistieron a las jornadas de la Competencia resultaron ganadores, dijo la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Olga Sánchez Cordero, en la medida de la excelencia y la extraordinaria preparación de todos los equipos.
“Todos ganamos con este tipo de concursos: los estudiantes, el auditorio, por el método pedagógico que significan, es un método de enseñanza-aprendizaje que fortalece a la Comunidad Universitaria”, celebró quien fungió como Presidenta de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH).
En simulación de la comparecencia del Estado de Bacuro (representado por la Universidad Iberoamericana (UIA) Campus Puebla), ante la CoIDH por el caso Andrea Noguera y las mujeres del Municipio de Palma (representado por la Universidad Autónoma de Yucatán). Además del Ombudsman capitalino, en la simulación de la comparecencia, el Jurado de la CoIDH también estuvo integrado por el propio Sergio García Ramírez; el Presidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), José de Jesús Orozco Henríquez; y la Directora de la Facultad de Derecho de la UNAM, María Leoba Castañeda Rivas, quienes fungieron como Jueces.
Los equipos participantes en la justa jurídica pertenecen a la Facultad de Derecho de la UNAM, la Universidad Autónoma de Yucatán; el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey Campus Guadalajara, Campus Estado de México y Campus Chihuahua; la Universidad Michoacana de San Nicolás Hidalgo; la Universidad Iberoamericana (UIA) Campus Puebla, Campus León, Campus Ciudad de México; la Universidad La Salle Campus Pachuca; la Universidad Autónoma de San Luis Potosí; la Universidad Nacional del Estado de Morelos; Universidad de Guadalajara; y la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Autónoma de Coahuila.
En tanto, el ex Presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), Sergio García Ramírez, cuyo mérito da nombre a la Competencia interuniversitaria, dijo que “Hoy el tema de los derechos humanos nos gobierna, nos preocupa y nos ocupa”, pues llegó a instalarse en el primer lugar de la reflexión jurídica de las autoridades y de la sociedad civil.
“Estamos reconstruyendo nuestro sistema jurídico nacional a la luz del derecho internacional de los derechos humanos, encarnado en un conjunto de tratados universales, internacionales o regionales de los que México es Estado parte, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales o como la Convención Americana sobre Derechos Humanos o Pacto de San José”, insistió.
No obstante, dijo en su Conferencia Magistral “La recepción y aplicación del Derecho Internacional en el ámbito interno de los Estados”, subsiste la necesidad de fortalecer esa proximidad, a través del ‘tendido de puentes’ entre el Orden Jurídico nacional y el Orden Jurídico internacional de los derechos humanos.
Dichos puentes, explicó, son de orden constitucional, político, cultural y jurisprudencial. En el primer caso, se refirió a la necesidad de reformar el Artículo 133 constitucional, una vez realizada la gran enmienda en materia de derechos humanos en 2011, particularmente con los párrafos agregados al Artículo 1º.
“Hubiera sido muy sano que se reformara también el 133 para aclarar de una vez por todas que las normas internacionales sobre derechos humanos integran con la Constitución una suerte de Bloque, de comunidad normativa, y que prevalecen conjuntamente en todos los casos”, insistió.
Respecto del puente político, dijo, pasa necesariamente por la revisión de las políticas públicas en todos los órdenes, por ejemplo educativo, penal, laboral familiar, procesal, penal, a la luz de los derechos humanos.
“No basta con que el buen ánimo, las intenciones o las decisiones del Orden Jurídico internacional de los derechos humanos se proyecte en la Constitución o las Leyes; es necesario que se proyecte en algo más, que es de más cotidiana aplicación, un verdadero factor o motor de desarrollo de una sociedad, que son las políticas públicas”, explicó el también miembro del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM.
Para garantizar la operación y funcionamiento de normas, discursos y retórica es preciso construir un puente cultural capaz de soportar los textos y palabras, y que es el secreto de una constitución democrática: “Atrás de la Constitución, en su base, deben existir costumbres, convicciones y usos democráticos del país, el fervor democrático del ciudadano y de las instituciones, un verdadero culto y cultivo de los derechos humanos”.
Y agregó: “Y que el gobernante, la autoridad, sientan realmente, por razones culturales y no sólo porque haya leído un Código, se sientan comprometidos con la causa de los derechos humanos, involucrados con el ser humano y sea, por ende respetuoso de los derechos de sus semejantes”.