Boletín 173/2013
24 de mayo de 2013
• Inicia el Curso “Derechos Humanos de las Mujeres” dirigido a líderes de Tlalpan
• Es posible juzgar con perspectiva de género y emitir sentencias diferenciadas de protección: Olga Sánchez Cordero
Al dar la bienvenida a las participantes del Curso “Derechos Humanos de las Mujeres”, dirigido a líderes sociales de la demarcación de Tlalpan, el Ombudsman capitalino, Luis González Placencia, señaló que pese a los avances legislativos en la materia, la ciudad de México sigue siendo la urbe que tiene más violencia comunitaria, la violencia que sufren las mujeres en la calle, en el transporte público, y en las relaciones cotidianas con los hombres.
El Presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) dijo que todavía cuesta mucho trabajo que los varones comprendan que lo que para ellos es un piropo o una manera de seducir, “es tan brutal y tan primitiva que representa un insulto, una falta de respeto para las mujeres. Hay mucho que aprender en ese tema en la ciudad”, recalcó.
Mencionó que los pendientes en cuanto a violencia institucional se tradujeron en la Recomendación 9/2011, “que deja ver distintas formas de relación discriminatoria, vejatoria ?? que son vistas como naturales o normales, o se intenta ocultarlas, como si fueran decisiones de carácter laboral ?, por no acceder a distintas peticiones y requerimientos de sus jefes”.
Indicó que hay que trabajar mucho para romper el “techo de cristal”, que son condiciones estructurales que no permiten que las mujeres puedan ejercer sus derechos en igualdad, respecto de los varones, “si a eso le añadimos la violencia intrafamiliar, de pareja, tenemos un contexto que hace más que necesario cursos como éste”.
Consideró pertinente que los varones empiecen a entender que cuando se habla de derechos de las mujeres, ellos son los principales obligados; “que no es un tema de mujeres, es un tema que nos interpela de manera directa a los varones”.
En su conferencia, la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Olga Sánchez Cordero, aseveró que es posible juzgar con perspectiva de género y emitir sentencias diferenciadas de protección.
“Juzgar con perspectiva de género es visualizar la discriminación, la situación y la relación de poder que siempre ha existido entre la mujer y el hombre, una situación de subordinación, de relación de poder diferenciada y tratar de que esta situación no genere la aplicación de una ley, aparentemente neutral, sino que a través de estas condiciones de vulnerabilidad se emita una sentencia diferente”, sostuvo.
Indicó que en el Poder Judicial de la Federación (PJF) se están llevando a cabo acciones afirmativas y de sensibilización. Al interior del propio PJF, añadió, estableciendo vías de denuncia de acoso sexual y laboral, y que en las sentencias que emitan Jueces y Magistrados éstos consideren las condiciones de discriminación y estigmatización de las mujeres.
Expresó que las mujeres han sido históricamente consideradas como uno de los grupos más vulnerables y vulnerados. “Esta vulnerabilidad se ha presentado en innumerables formas a lo largo de la historia, en la violencia física y síquica, la esclavitud sexual, violaciones a sus derechos reproductivos, la criminalización del aborto, la explotación laboral, el tráfico de mujeres, la discriminación económica, y hoy se habla de discriminación política”.
Refirió que los estados contemporáneos están sujetos a un sistema jurídico interno e internacional, y en el caso de México, ha recibido más de cinco condenas de la Corte Interamericana, dos sobre derechos de las mujeres, en materia de feminicidios, y hasta la fecha el Estado no ha hecho nada, ya que siguen ocurriendo en Ciudad Juárez y otros estados de la República.
Destacó la Reforma en Derechos Humanos del 2011, que mandata a todas las autoridades y todos los niveles de gobierno, el respeto, la protección y la reparación, cuando ha sido violados los derechos humanos; “con esta normativa se han ido acortando las distancias que marcan las diferencias”.
Subrayó que “En realidad estas diferencias han sido ideológicamente creadas, han sido estereotipos frente a aquellos grupos o comunidades que por circunstancias de pobreza, de origen étnico, de estado de salud, de edad, de discapacidad, y de género, se encuentran en una situación de mayor indefensión para hacer frente a los problemas que la misma vida les plantea”.
Expuso que no bastan las acciones afirmativas para romper las barreras que marcan estas diferencias, “se requiere de personas como ustedes que sensibilicen para que participen en la sensibilización de otras tantas, mujeres y hombres”.
En la ceremonia, la Jefa Delegacional en Tlalpan, Maricela Contreras, explicó que el curso está orientado a las mujeres que en su carácter cotidiano han generado liderazgo en su comunidad, con el propósito de crear conocimientos para hacer que más mujeres cuenten con herramientas para hacer exigibles sus derechos.
“Me interesa muchísimo que no seamos solamente una masa acarreable, que seamos una masa que llena plazas en las actividades políticas o institucionales, sino que tengamos la firme convicción de la posibilidad de decidir por dónde vamos y hacia dónde queremos llegar”, dijo.
El curso durará nueve sesiones para concluir con dos talleres e iniciar un Diagnóstico para direccionar las políticas públicas de su gobierno.
Estuvieron presentes la Directora del Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF), Beatriz Santamaría Monjaraz; y la Presidenta del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en la Ciudad de México (Copred), Jacqueline L’hoist Tapia.