lunes , 29 mayo 2023

Entrevista al Doctor Luis González Placencia, al término de la inauguración del III Seminario Nacional Empoderamiento de la Ley General de Acceso de las Mujeres a Una Vida Libre de Violencia..

Transcripción 94/2011
22 de noviembre de 2011

Pregunta (P): Cuéntenos sobre los pendientes  en contra de la violencia a las mujeres en el Distrito Federal. ¿Cuáles serían los principales?

Luis González Placencia (LGP): Cómo se sabe el Distrito Federal es el primer lugar en el país en violencia comunitaria, me parece que es el que señala el primer y más importante de los pendientes, y muestra con toda claridad como los avances normativos no son suficientes, no siempre son suficientes. Tenemos leyes muy avanzadas en términos de los derechos de las mujeres, pero todavía es necesario convertir eso en política pública y lo que es más importante, generar actitudes y valores de respeto hacia las mujeres.

P: ¿Aquí en el Distrito Federal harían falta recursos?

LGP: Yo creo que hace falta que se aplique de manera transversal la perspectiva de género, es decir, es necesario que no sólamente las mujeres como entidad encargada de este tema intervenga, sino que en todas las instituciones tiene que tener programas con perspectiva de género, para que la política pública finalmente sea una política pública con perspectiva de género. Por supuesto cuesta mucho dinero,  pero tiene que ver mucho más con el cambio de actitud y la generación de valores de equidad de género.

P: Doctor. El Gobierno del Distrito Federal desde hace muchos años ha venido diciendo que todas sus políticas tienen perspectiva de género, que su presupuesto es con perspectiva de género, entonces ¿o está fallando la estrategia, o no es así? ¿Qué es lo que está pasando?

LGP: Reconocemos que hay una importante labor en ese sentido, que ha habido por ejemplo varias organizaciones de derechos de mujeres que han trabajado en el tema de género, lo han hecho con varias instituciones, pero el tamaño del reto es tal que no basta, es decir, todavía hay pendientes muy importantes que hay que cubrir. Lo más importante es que eso tiene que trascender  a las relaciones sociales.

P: ¿Qué pendientes serían los más importantes?

LGP: Justamente el de poder reconocer que todavía hay una serie de prácticas que son vistas como prácticas culturales, que forman parte de la educación en la relación de las personas que son violentas, no son reconocidas como tales y todavía se sigue perpetuando por ejemplo, la diferencia de géneros en  términos de las actividades laborales, hay actividades laborales para mujeres y actividades para hombres. Tenemos que desgenerizar en ese sentido, por ejemplo la actividad profesional, hay que romper el techo de cristal, que a pesar de los esfuerzos que se han hecho, todavía vemos que la mayor parte de las personas que ocupan puestos importantes, no solamente en el gobierno, o en los órganos de gobierno de la ciudad, sino en la iniciativa privada son varones. Así que el aprendizaje que queda todavía es mucho.

P: ¿Se podría decir que a nivel federal y a nivel local no se ha pasado del discurso?

LGP: Desafortunadamente no, aunque se han hecho esfuerzos muy importantes, y yo creo que es una de las áreas en donde más avances tenemos, todavía es necesaria ahondar mucho más.

P: Pero entonces, ¿dónde estaría este gran problema? ¿en las leyes?

LGP: Es un problema de actitud y de valores, de educación. Tenemos que trascender ese nivel para que desde que en la temprana infancia las niñas y los niños aprendan a tener relaciones respetuosas.

P: ¿Entonces los programas no han funcionado?

LGP: Todavía me parece que queda mucho por hacer, tenemos también un problema ahora que lo comentan ustedes de violencia en el noviazgo, un muy importante problema de violencia en el noviazgo. Todavía hay quién cree que revisar el celular de la novia o el novio es una conducta adecuada por ejemplo, que los celos son un proceso puramente biológico y no es verdad. Todos estos son procesos de aprendizaje culturales que comportan relaciones violentas. Ese es el tamaño del reto.

P: Desde la perspectiva de la Comisión, ¿tipificar el feminicidio ayudaría a disminuir la violencia o los homicidios de las mujeres?

LGP: Hay una parte sin duda que tiene que ver con el mensaje simbólico que envía cualquier penalización, en ese sentido lo que está diciendo el Gobierno de la ciudad al tipificar el homicidio es que la vida de las mujeres es valiosa, es un fin que hay que cuidar con la mayor consecuencia posible que es la de una pena en un Estado como el nuestro. Sin embargo es cierto también que eso  debe de acompañarse de otra serie de prácticas, por ejemplo, la creación de protocolos como los que se han presentado ya, y la posibilidad de que en la mentalidad de los Ministerios Públicos y  de los Jueces esté la lógica de  generar equidad efectivamente a través de estas sanciones. Ahora un punto que es muy importante, que destacaban algunas compañeras feministas acá, la lógica de la tipificación es distinta cuándo se hace desde la perspectiva femenina, porque endosa una lógica punitiva, deja lo punitivo como un recurso desde luego, pero se centra mucho más la visión preventiva y en la de generar condiciones para restaurar las relaciones rotas por la violencia institucional.

P: ¿Es lo que haría falta en este caso?

LGP: Así es,  y me parece que este es un aprendizaje interesante que hay que aplicar a todo el sistema penal.

P: Cambiando de tema doctor. En la semana el Jefe de Gobierno anunció que les iba a dar salario a los comités vecinales, esto en detrimento del presupuesto de los Órganos Autónomos, ¿cuál es la posición de la Comisión  de los Derechos Humanos al respecto?

LGP: Bueno, él hizo la sugerencia, agradecemos la sugerencia, pero pensamos que si se trata de una iniciativa del Gobierno, los fondos tiene que salir del Gobierno. Nos parece que no es adecuado, primero  porque somos Órganos Autónomos, nosotros tenemos autonomía para decidir cómo gastamos nuestros presupuestos, segundo, lo que me parece más importante es que somos órganos austeros, por lo menos la Comisión de Derechos Humanos lo es. Nosotros tenemos el mismo salario desde hace nueve años, todo mi equipo, quienes están trabajando conmigo y quienes trabajaban desde la administración anterior tenemos el mismo salario de hace nueve años. Tenemos niveles de gasto que no se comparan en absoluto con los que tiene el Gobierno de la ciudad, entonces pensamos que la sugerencia es buena, pero no es aceptable.

P: Este anuncio, sugerencia, ¿significaría que  serían menos recursos de presupuesto para la Comisión de Derechos Humanos y los demás Organismos Autónomos?

LGP: Sí, desde luego. Yo creo que cualquier iniciativa de gobierno, debe estar acompañada de un plan que prevea que tenga cobertura presupuestal, y no de modo tal que le tengamos que  quitar presupuesto después a otras instituciones.

P: ¿Ustedes ya han hecho su propuesta?

LGP: Mañana la hacemos.

P: ¿Cuánto van a pedir?

LGP: Vamos a pedir sobre los 300 millones de pesos, tenemos un estudio que ustedes verán el día de mañana, en el que se hace la consideración de la pérdida real del valor adquisitivo del presupuesto que hemos tenido en los últimos seis años. Ahí queda muy claro cómo hemos venido trabajando con mucho menos dinero, haciendo mucho más cosas en un esfuerzo de administración impresionante que ha tenido la Comisión, pero ahora tenemos nuevas responsabilidades constitucionales.

P: ¿De cuánto sería el aumento que están solicitando?

LGP: Estamos solicitando un aumento que no es tampoco  altísimo, es alrededor del 5% más o menos.

P: En caso de que esta sugerencia se convirtiera en un hecho, ¿qué es lo que ustedes podrían hacer para evitar  que se les quiten a ustedes recursos?

LGP: Bueno, ahora tenemos el contexto de la reforma constitucional en materia de derechos  humanos, pensamos que cualquier retroceso, incluso presupuestal, en términos de lo que implica la protección y promoción de los derechos humanos, resulta inconstitucional, entonces actuaríamos en consecuencia.

P: ¿Una controversia entonces?

LGP: Una acción de inconstitucionalidad.