Transcripción 34/2011
8 de abril de 2011
Pregunta (P): ¿Qué nos puede decir acerca de la apertura del Centro Comunitario de Atención a la Diversidad Sexual?
Doctor Luis González Placencia (LGP): Bueno, me parece que es un logro muy importante de la comunidad LGBTTTI. En principio esto forma parte de los compromisos del Gobierno de la ciudad, respecto del Programa de Derechos Humanos de la ciudad de México y creo que la virtud de este Centro es que ha logrado un elevado grado de consenso entre las organizaciones. Es un lugar para ellos y ellas, y creo que es importante considerarlo no como un punto de llegada, sino como un punto de partida. A partir de aquí todavía hay muchísimo más que hacer; creo que es importante en términos de la construcción de ciudadanía, de la construcción de respeto, de la construcción, digamos, de no solamente desde el punto de vista normativo de las circunstancias que tienen que tomarse en cuenta para el respeto de la orientación sexual y de la identidad de género, sino también en términos del avance de cultura, en términos de respeto de las personas heterosexuales respecto de los miembros de la comunidad.
P: ¿Hace falta legislación para garantizar estos derechos?
LGP: Yo creo que hemos dado un avance muy importante. Me parece que de entrada las reformas al Código Civil son una muestra importante de cómo con simplemente variar una palabra se puede generar un amplio abanico de derechos para personas que luego son excluidos, en este caso por ejemplo de la institución civil del matrimonio, pero no cabe duda que hay que avanzar más en términos de seguridad social, en términos de seguridad laboral, en términos de respeto a la no discriminación; todo eso hace falta. Afortunadamente tenemos el marco jurídico para exigir ese respeto y más bien lo que tenemos que buscar es que estos cambios en la ley generen cambios también en la sociedad, que la gente esté mucho más consciente de cuáles son sus derechos y de cómo puede exigirlos.
P: ¿El Distrito Federal es puntero en materia de derechos humanos?
LGP: No tengo duda, yo creo que eso está muy claro. Si vemos alrededor, pues lo que vemos es todavía actitudes de intolerancia, de respeto. En ese sentido me parece que es importante que eventos como éste llamen la atención sobre las situaciones que tenemos en los estados y sobre la necesidad de homologar, porque no puede ocurrir que el Distrito Federal se convierta en una isla. Estos derechos tienen que ser reconocidos en el país, porque hay instituciones federales que tienen que reconocerlos como ciudadanos que somos de este país; y en ese sentido, empujar también por supuesto las reformas legislativas y la reforma cultural que es necesaria para garantizar los derechos de la comunidad.
P: Doctor, ¿aproximadamente cuántas denuncias recibe la Comisión respecto a la falta de respeto y de oportunidades a la gente que tiene preferencias sexuales diferentes?
LGP: Todavía desafortunadamente seguimos recibiendo quejas por discriminación, particularmente debidas a la situación laboral y también por la obstaculización de acceso a determinados servicios o lugares. Cuantitativamente me parece que no son representativas de lo que en realidad ocurre, pero independientemente de que sean pocas o muchas, sí son un ejemplo que nos permite conocer que todavía hoy, aún en instituciones del Distrito Federal a pesar del empuje que se ha dado a estas iniciativas, se siguen dando actos discriminatorios
P: ¿Las agresiones físicas son comunes o han disminuido hacia estas personas?
LGP: Me parece que en términos generales han disminuido, pero no solamente hay que tomar en cuenta las agresiones físicas, sino la violencia que no es física, la violencia que se representa a través de las actitudes, y esa es la que me parece que es la que ha incrementado. Tenemos denuncias, no tenemos verificado, lo tengo que decir con claridad, que después de que se aprobó la reforma al Código Civil se dieron situaciones de rechazo en muchos ámbitos. Entonces yo creo que tenemos que buscar que las instancias, la Comisión desde luego, pero que las demás instancias de protección de derechos humanos que operan en la ciudad de México, podamos tener un pulso más fino y podamos ver cada una en su ámbito de intervención qué es lo que toca hacer para evitar que esto siga ocurriendo.
P: Derecho del servicio médico para estas personas, ya ve que todavía hay instituciones que se los están negando, ¿cómo está trabajando Derechos Humanos para apoyarlos?
LGP:En la ciudad de México no tenemos esa dificultad por fortuna, se da más bien en el ámbito federal, y lo que sabemos es que hay ya una serie de medidas que se han tomado desde la perspectiva de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y a nivel también político para tratar de que todos tengan acceso a la seguridad social y al servicio médico. Ahora, eso también implica cambios a nivel federal que le toca a otras instancias desafortunadamente empujar, pero el hecho de que desde aquí estemos haciendo todos estos movimientos, todas estas movilizaciones, la inauguración de este centro, me parece que son indicadores muy importantes de que ese avance se está dando y de que estamos en condiciones de empujarlo esto hacia todo el país.
P:¿En qué va a ayudar este Centro, Doctor?
LGP: Bueno, en principio es un lugar que ayuda a que las personas miembros de la comunidad LGBTTTI tengan un espacio para desarrollar los derechos, para exigir los derechos que tienen. Yo he dicho que se trata más de un punto de partida que de un punto de llegada. Creo que es importante porque fue el producto de consensos en las organizaciones que forman parte de la comunidad, pero todavía hay que construir más. A partir del Centro ellos van a tener la posibilidad de acceder a muchos de los servicios que otorga la ciudad, pero el Centro tiene que jugar un rol más importante en términos de la afirmación de las identidades que configuran a la comunidad, todo el trabajo que hay que hacer desde la perspectiva cultural y desde luego todo el trabajo que hay que hacer en torno a la necesidad de armonizar lo que tenemos hoy en el Distrito Federal con lo que hay en el país.
P: Oiga, doctor, cambiando de tema, ayer detuvieron a un implicado más en el secuestro de la señora Ceballos Coppel, ¿cuál es su opinión al respecto y si no le parece raro que un delincuente de este tamaño de repente esté vendiendo discos piratas en el Metro sin mayor problema?
LGP: Bueno, las condiciones de invisibilidad en la ciudad permiten eso y más, pero la verdad es que nos congratulamos de que haya sido así. Vamos a ver qué información nos da la Procuraduría porque eso forma parte del seguimiento de la Recomendación respectiva. Si efectivamente se confirma creo que es una buena noticia. Esperemos que eso ayude también a reducir la impunidad.
P: ¿Siguen manteniendo contacto con la familia Ceballos Coppel?
LGP: Seguimos manteniendo contacto. El contacto se ha reducido también porque ellos mismos han solicitado mayor respeto. Sin embargo, seguimos teniendo contacto con ellos. Sobre este punto en particular no hemos hablado con la familia, nos enteramos esta mañana y como siempre estamos abiertos a que cualquier cosa que ellos quieran que nosotros intervengamos lo haremos.
P: Por último, ¿la Recomendación ya se ha cumplido en su totalidad y qué pasa con este Instituto para las Adicciones que llevó a cabo el Distrito Federal?
LGP: Bueno, ese es uno de los puntos que está todavía pendiente. Desde luego nos congratulamos de que el Instituto se haya instaurado ya, pero todavía hace falta dotarlo de presupuesto, hace falta dotarlo de un programa de trabajo que nos dé muestra de que efectivamente el tema se está atendiendo.
P: ¿Ya hay fecha para eso?
LGP: No hay una fecha precisa; nosotros hemos estado insistiendo; de hecho felicitamos el nombramiento de su actual directora, que nos parece muy atinado; y entendemos que es un proceso lento, pero vamos a seguir insistiendo hasta que podamos tener ya claridad sobre cómo funciona y cuáles son sus objetivos más específicos.
P: Doctor, se han realizado marchas contra la violencia en todo el país y el Gobierno federal hace oídos sordos, ¿qué opinión le merece esta actitud?
LGP: Pues como he dicho, yo creo que estas marchas hay que leerlas en términos del hartazgo que hay en la ciudadanía, de la sensación que hay de estar en medio de una guerra que no es nuestra, a pesar de que se haya enarbolado por el bien de nosotros sin habernos preguntado, por cierto, y en ese sentido me parece que hay que atender el llamado de la ciudadanía. No creo que de ahí se deban derivar posiciones ingenuas, la violencia no se va a acabar, la guerra no se va a acabar, pero sí creo que esto debe ser un llamado de atención para que las autoridades asuman la responsabilidad que tienen en las más de 30 mil muertes que desafortunadamente tenemos.
P: Cada vez es más inadmisible, Doctor, que autobuses de pasajeros sean secuestrados en el país, ¿habría una precisión que haría la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal a, no sé, la Nacional?
LGP: Hoy en la ciudad de Campeche está reunidos varios Ombudsman, yo no pude ir finalmente por esta actividad, pero hay una representación nuestra ahí que está haciendo la solicitud. Ayer hablé yo con gente de la Comisión Nacional y con el Presidente de la Federación de Ombudsman para tratar de hacer un comunicado conjunto. Si logramos los consensos seguramente el domingo se dará a conocer ese comunicado. En todo caso, si los consensos no se logran lo haremos nosotros desde la propia Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, y creo que va en ese sentido. Desafortunadamente la vida cotidiana de muchas personas está siendo afectada totalmente, la gente no sale, la gente no utiliza las carreteras, particularmente en el norte del país, pero creo que son llamados de atención importantes para verificar de qué manera está afectando toda esta situación a las personas en concreto.
P: ¿Pero qué decirle precisamente a los gobiernos tanto local como federal porque parece ser que son de oídos sordos?
LGP: Exactamente, acabas de tocar un punto que es fundamental. Normalmente nos centramos en la estrategia porque viene del Gobierno federal, pero también creo que es importante hacer un llamado a los gobiernos locales, eso obedece a lo que yo he llamado la ficción de las jurisdicciones o de las competencias. Los problemas son nacionales y tocan a todos, entonces tanto los gobiernos locales como el Gobierno federal tienen que actuar en sinergia para resolverlo. Entonces el llamado concreto es a revisar si el costo que se ha pagado es el costo que se ha querido pagar y que hoy se muestra en un número desproporcionado de víctimas, no en una reducción del consumo y no en una reducción del poder bélico de las organizaciones criminales. Entonces aquí me parece que eso es lo que hay que revisar. Cuando hablamos de revisar la estrategia hablamos de saber si los objetivos que se han logrado son efectivamente los que se buscaban lograr; y si no es así, como yo me atrevo a pensar, porque no creo que nadie quiera la muerte de tantas personas, entonces sí hacer un replanteamiento e interpretar de qué manera se puede abordar esta situación reduciendo la violencia. Muchas gracias.