Comunicado 8/2010
11 de noviembre de 2010
El 29 de enero de 2009, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), con motivo de dos órdenes judiciales expedidas por jueces penales en la Ciudad de México, efectuó cateos simultáneos en dos inmuebles en los que operaba » La Casita del Sur» y recuperó a 126 niños y niñas.
De la investigación realizada por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), se evidenció que no existía una efectiva coordinación y control entre las dependencias encargadas de velar y salvaguardar el interés superior de los niños y las niñas, ni se daba seguimiento a su situación jurídica, física o emocional e incluso, en algunos de los casos, se desconocía si los niños y las niñas que habían sido canalizados por la PGJDF permanecían en las instituciones a las que fueron ingresados por la falta de una instancia que supervisara la actuación de las asociaciones civiles que brindan servicios asistenciales; También se encontraron lagunas legales con respecto a la vigilancia de los establecimientos de asistencia social que reciben a niños y niñas. Por lo anterior, el 20 de abril de 2009, la CDHDF emitió la Recomendación 4/2009, dirigida a la PGJDF, al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Distrito Federal y a la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno del Distrito Federal.
La Recomendación consideró 25 puntos. Hasta la fecha, cuatro han sido cumplidos totalmente, mientras que el 84 por ciento restante tiene pruebas de cumplimiento parcial, lo que nos conmina, a este organismo y a las autoridades recomendadas, a sumar esfuerzos para concretar el cabal cumplimiento de toda la recomendación. Entre los pendientes por cumplir se encuentran la realización de acciones suficientes para contar con la información correspondiente de todos los niños y niñas que hayan sido canalizados a la casa hogar, así como una base de datos que incluya el registro de la totalidad de los niños y niñas que se encuentran en albergues o son canalizados. También resta concretar un programa de verificación para las casas hogares, instituciones y albergues que brindan asistencia a la niñez.
A casi dos años de los acontecimientos, se han registrado avances en lo que se refiere a la garantía de no repetición de hechos como los que fueron objeto de la Recomendación: las tres autoridades involucradas han trabajado en la elaboración de protocolos que resuelven en buena medida los problemas estructurales detectados en la Recomendación; entre ellos, el » PROTOCOLO PARA EL SEGUIMIENTO DE NIÑAS, NIÑOS Y ADOLESCENTES QUE SE ENCUENTRAN EN UNA SITUACIÓN EN QUE SUS DERECHOS HUMANOS SON O PUEDAN SER VIOLENTADOS» y el «PROTOCOLO DE OPERACIÓN DE LA BASE DE DATOS PARA EL REGISTRO DE LOS NIÑOS Y NIÑAS QUE RECIBEN ATENCIÓN Y SEGUIMIENTO POR PARTE DE LA PROCURADURÍA GENERAL DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL, LA SECRETARÍA DE DESARROLLO SOCIAL Y EL SISTEMA PARA EL DESARROLLO INTEGRAL DE LA FAMILIA DEL DISTRITO FEDERAL». Esta Comisión insta a las autoridades para que los protocolos sean aprobados y sobretodo implementados a la brevedad, no sólo en aras de dar cabal cumplimiento a los puntos recomendatorios relacionados con los mismos, sino porque su efectiva aplicación contribuiría significativamente a la consolidación de una política pública a favor de las niñas y los niños de la ciudad de México.
A pesar de estos esfuerzos, la Comisión desea hacer notar la gravedad que implica que, hasta la fecha, al menos 12 niños continúen desaparecidos y que la mayoría de las personas presuntamente responsables aún no hayan recibido sentencia, lo que abona en la sensación de impunidad que produce el caso.
Ante esta situación, el Consejo Consultivo de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y su Presidente, hemos considerado necesario insistir en que la desaparición de niñas y niños con motivo de los hechos que dieron origen a la Recomendación debe ser considerado prioritario entre los pendientes que el Estado Mexicano en su conjunto tiene y ha decidido hacer pública su exigencia de que todas las autoridades involucradas, tanto a nivel local como Federal, intensifiquen sus esfuerzos para que a la brevedad se conozca el paradero de las niñas y los niños que aún se encuentran desaparecidos y para que, en su caso, se les brinde la atención y el apoyo que sea necesario. Al mismo tiempo, deseamos llamar la atención de las organizaciones de la sociedad civil, los medios de comunicación, las y los ciudadanos y toda aquélla persona que pueda aportar información sobre el caso, para que contribuya en lo que sea posible para su pronta localización.
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal reconoce la colaboración que recientemente se ha establecido con la Procuraduría General de la República para estos fines y le exhorta respetuosamente a dar mayor celeridad a sus investigaciones, para la recuperación de las niñas y los niños y para que se sancione a los responsables.
Finalmente, hacemos un llamado a la Procuraduría General de Justicia, al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y a la Secretaría de Desarrollo Social del Distrito Federal, como autoridades recomendadas, para que redoblen sus esfuerzos hacia el cumplimiento definitivo de la Recomendación 4/2009, y a la comunidad de este país para que no olvidemos que el caso involucra la vida y la integridad de niñas y niños, cuyos derechos son obligación del Estado Mexicano y de todas y todos nosotros que, como adultos, también somos responsables de garantizarlos