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63/2010 Disculpa pública por parte de la Delegación Miguel Hidalgo a un Peticionario, en cumplimiento al Primer Punto de la Recomendación 13/2009.

Entrevista al Doctor Luis González Placencia, luego de la disculpa pública por parte de la Delegación Miguel Hidalgo a un Peticionario, en cumplimiento al Primer Punto de la Recomendación 13/2009.
Transcripción 63/2010
25 de mayo de 2010

Pregunta (P): ¿Sería ya el tiempo o, con este acto, de hacer un llamado al Jefe de Gobierno capitalino, de que si se disculpó ya un Delegado, está pendiente la disculpa pública del Jefe de Gobierno por el caso New’s Divine y de otros funcionarios por algún otro tipo de casos? ¿Habría un llamado a hacerla o no pasa nada y, al contrario, como que empieza a recomponerse?

Luis González Placencia (LGP): Yo creo que la disculpa pública, aunque ha sido una de las medidas que nosotros planteamos en nuestras Recomendaciones que más trabajo les cuesta a la autoridad aceptar, es una demostración, por una parte, de que las autoridades están al servicio de la ciudadanía. Implica un reconocimiento de que se actuó de manera tal que se violaron los derechos de las personas. Implica un reconocimiento también a la autoridad de la Comisión de Derechos Humanos y da una señal clara de comunicación franca y llana entre la autoridad y las y los ciudadanos. Nos parece que este es uno de los vehículos más importantes de reparación del daño, desde luego, el tema económico es importante en algunos casos, pero no en todos. Por ejemplo, en este caso, restaurar la imagen, la buena imagen, la reputación de una persona que fue dañada por un acto de gobierno es fundamental, recupera a la persona, le permite rehacerse también como miembro de una comunidad y, como ustedes vieron, pues no se trata sino de simplemente reconocer y disculparse. Entonces, sí, hacemos una invitación a que otras autoridades consideren que esta es una posibilidad importante de reparación a violaciones de derechos humanos.

P: En este caso, doctor, usted comentaba que se tardó en hacer la investigación, finalmente viene el cambio en la Jefatura Delegacional, ¿se deberían apresurar estos procesos para que sea el mismo funcionario, el que cometió el error, el que se disculpe y no pase como ahorita, que ya es incluso otra administración la que tiene que hacerlo?

LGP: Por la manera en la que se construye la responsabilidad en materia de derechos humanos, esta responsabilidad no es de un funcionario en específico, sino de una institución. En ese sentido, no importa si cambia o no cambia la autoridad, y eso es importante, porque en estos casos, por ejemplo, en que una investigación nos toma más tiempo del que implicaba para la ex Delegada estar en funciones, la Recomendación no pierde fuerza y al contrario, se abre la posibilidad de que haya una reconsideración, como en este caso la hubo, con beneficio para el peticionario. Entonces, aunque sí, efectivamente tenemos que buscar mecanismos para realizar las investigaciones lo antes posible, el tema de la responsabilidad objetiva implica que nadie puede deshacerse de las responsabilidades cometidas por servidores públicos que estuvieron en funciones antes, cuando llegan a la titularidad de órganos que cometieron violaciones.

P: ¿Esta es la primera disculpa en su tipo?, porque se han dado a otras personas, como a Carlos Ahumada.

LGP: Sí, ha habido ya en otros momentos de la Comisión, pero a mí me parece que ésta es paradigmática, primero, porque es la primera vez que ocurre que un Jefe Delegacional realiza una disculpa pública; segundo, porque se trata de un caso en el que la honra y la reputación de una persona es la que fue afectada como resultado de un acto de gobierno, y hoy más que nunca la disculpa pública tiene un sentido restaurativo, forma parte de la reparación del daño para víctima.

P: Doctor, ¿cuál es la lectura del caso Diego Fernández de Cevallos?, la PGR ha abandonado a petición de la familia, ¿esto está bien o está mal?

LGP: Bueno, lo primero que tengo que decir es que este caso tendría que ser tratado como muchos casos de desapariciones que se dan en el país, que desafortunadamente por no tratarse de personajes públicos no implican todo el despliegue que ha implicado este caso. En segundo lugar, es claro que se trata de un personaje que ha tenido una influencia pública muy importante en el país y nos parece que, en todo caso, esa condición, esa pertenencia de la persona a este linaje político sí implica que haya una atención especial. No quiere decir que tenga que haber un despliegue especial para este caso, como no lo hay en otros; a lo que me refiero es a que es necesario tener atención acerca de qué es lo que está pasando con el paradero del señor Fernández de Cevallos. Yo creo que es importante que las autoridades estén en capacidad de dar una explicación clara, que serene a los medios de comunicación, que serene a las y los ciudadanos y que en la medida de lo posible pueda implicar un mensaje también de estabilidad para el país.

P: Desde el Poder Legislativo, algunos diputados y senadores han pedido que se trate parejo, como usted lo dijo.

LGP: Sí, yo creo que ese es un reclamo de toda la sociedad mexicana, el trato desde el punto de vista institucional debe ser el mismo que se le da a cualquier otro ciudadano, pero también creo que por la relevancia política que puede tener, por las consecuencias que eventualmente puede tener esta desaparición, la autoridad está obligada a tener una comunicación clara, llana, con la ciudadanía y a informar todo lo que sepa sobre el caso.

P: ¿Cómo van las investigaciones del tutelar?

LGP: Hemos estado recabando testimonio, nosotros estuvimos presentes el domingo ahí y las actas circunstanciadas levantadas por mis Visitadores dan cuenta de que hubo al menos seis jóvenes que fueron agredidos por funcionarios públicos de la institución, por guías, tenemos los datos. Desafortunadamente no se nos permitió que ingresaran las cámaras y ayer no hubo acceso para los médicos, entonces, eso dificulta la investigación de las lesiones. Pero como todos ustedes saben, nosotros tenemos fe pública y esos hechos fueron presenciados por Visitadores de la Comisión, están asentados en actas y, bueno, yo creo que sería conveniente, incluso para la autoridad, que se permitiera el acceso pleno de los Visitadores a estos jóvenes, para poder dar fe con toda claridad, a través de un examen médico, de cuál es la naturaleza de las lesiones.

P: ¿Ustedes ya habían recibido quejas de que los jóvenes no estaban recibiendo la cantidad de alimentos suficiente?

LGP: Las habíamos recibido, desde luego, todo el tiempo. En estos últimos meses habíamos tenido una especie de calma, no habíamos tenido quejas, hicimos algunas visitas a estos lugares, platicamos; yo, personalmente estuve en algunas de esas visitas, platicamos con los jóvenes, no habíamos apreciado ningún elemento que nos hiciera pensar que podría haber un desorden, pero desde luego que nuestro papel y nuestra obligación es creer lo que nos dicen los jóvenes, lo estamos nosotros considerando como una de las fuentes de la riña, de la violencia que se generó ahí adentro y forma parte también de la investigación que está abierta.

P: ¿Cuál es la respuesta que esperarían ahora ustedes de las autoridades, porque tanto las de reclusorios como las del tutelar insisten que no pasa nada y que todo va más o menos?

LGP: Ya vemos que sí pasa. La actitud que esperamos es que haya apertura, que nos dejen trabajar. Nosotros estamos seguros de que la investigación de la Comisión no solamente servirá para reparar los daños que eventualmente se hayan causado a los jóvenes que fueron agredidos, sino para mejorar el sistema. Entonces, es importante que haya apertura, que haya una actitud de colaboración con la Comisión, que además, hay que recordarlo, es obligación de las instituciones colaborar con la Comisión.

P: En este caso, la Directora del tutelar mencionaba que el conflicto fue por una riña, por ofensas entre los visitantes de los reos, usted mencionaba que no fue así, que comenzó por otro tipo de.

LGP: No, sabemos., es posible que haya comenzado por una riña, eso nosotros no lo ponemos en duda, lo estamos investigando, desde luego, pero tampoco el tema es relevante. El asunto es que esa riña genera una situación de violencia al interior de la institución que es controlada con un uso abusivo de la fuerza. A la hora en la que platicamos con los jóvenes, ellos nos señalan como parte de sus inconformidades éstas que he comentado, el tema de la alimentación y el tema de las revisiones a las visitas; entonces ya se convierten en elementos para que nosotros también investiguemos, independientemente de si ese es el origen de la violencia.

P: ¿Llegó a tener el grado de motín o simplemente quedó en riña?

LGP: Hasta donde nosotros sabemos, el asunto quedó en una riña; hay otros jóvenes que fueron lesionados dentro de la violencia generada por la riña. Afortunadamente no hay cosas que lamentar, en términos de vida o de heridos graves, pero sí nos preocupa que la autoridad niegue lo que es evidente y lo que pudimos nosotros constatar, a través de la observación directa.

P: Usted comenta que no le permitieron la entrada, ¿de las autoridades que ustedes han tenido que tenido que tomar participación, cuáles son las que más se niegan, las judiciales, las civiles, los particulares, en un momento dado para que ustedes investiguen?

LGP: Desafortunadamente es justamente aquí en el Sistema de Justicia para Adolescentes donde más problemas hemos tenido. Con otras autoridades afortunadamente eso no se presenta como una constante.

P: Ayer hablaba el Presidente de la República de la corrupción en el sistema judicial, ¿qué tanto tiene averiguaciones, investigaciones o Recomendaciones para el sistema judicial del Distrito Federal la Comisión?

LGP: Pocas, desafortunadamente pocas porque nosotros no tenemos competencia en asuntos jurisdiccionales, aunque sí vigilamos el debido proceso y todos los actos administrativos del poder judicial del Distrito Federal. Pero el número de quejas no es significativo.

P: ¿Qué tanto la Comisión de Derechos Humanos la siguen haciendo a un lado; o sea, se acepta la Recomendación, pero ya después no se aplica? La Comisión Nacional de Derechos Humanos comentaba que ellos tienen ese problema, sobre todo en casos muy serios. ¿En el caso del Distrito Federal qué tanto se les escucha, pero no se aplica posteriormente el cambio?

LGP: Bueno, no es fácil generar el cumplimiento. No es fácil general la aceptación primero, y en un momento posterior no es fácil generar el cumplimiento. Pero nosotros somos una de las primeras Comisiones que tuvo un área de Seguimiento que específicamente se dedica a eso: a estar sobre las autoridades para ir generando el cumplimiento. A veces el cumplimiento no se da todo en un solo acto, se va cumpliendo poco a poco, pero nosotros rendimos anualmente un Informe sobre cómo está la situación del seguimiento de las Recomendaciones.

P: Doctor, disculpe, hablando de disculpas públicas, ¿qué ha pasado con el caso de la disculpa pública del Jefe de Gobierno en el tema del New’s Divine y en otros asuntos?

LGP: Bueno, hasta donde sé está pendiente todavía la disculpa pública. Ese es uno de los elementos que no se ha cumplido de la Recomendación. Ojalá antes de que se cumpla un aniversario más de la tragedia podamos tener una respuesta positiva del Jefe de Gobierno en ese sentido.

P: El hecho de que un Delegado sí dé una disculpa pública y el Jefe de Gobierno del Distrito Federal no lo haga, ¿qué mensaje está mandando en la defensa de los derechos humanos en esta ciudad?

LGP: Bueno, a mí me parece que es muy importante que lo haya hecho un Delegado, ese es uno de los órdenes de gobierno más cercanos a la ciudadanía; y me parece que eso, por una parte, habla bien de una autoridad que acata la Recomendación de la Comisión, y también de una autoridad que está dispuesta a dialogar con sus ciudadanos, no obstante haber reconocido una violación a sus derechos humanos. Creo que el mensaje es positivo, es un mensaje que, ya he dicho hace un momento, tiene que tener algún efecto en otras autoridades que también estén pendientes de cumplir.

P: ¿Cuál sería el llamado a Marcelo Ebrard en este caso?

LGP: Ese que hice hace un momento, de que ojalá antes de que tengamos un aniversario más del caso New’s Divine tengamos una respuesta favorable de la Jefatura de Gobierno.

P: Una última, el hecho de que no haya practicado el cumplimiento de esta parte de la Recomendación, ¿no habla de que tiene un doble discurso, al decir que se defienden los derechos humanos y por otra parte no hacer caso a esta Recomendación?

LGP: Bueno, la Recomendación, como ustedes recordarán, tenía 40 puntos, de esos ya se ha cumplido una parte importante. Nosotros creemos que este tema de la disculpa pública es uno de los más importantes, uno de los más fuertes, y por eso hemos conminado a que se cumpla. Recordarán que hubo un primer acto en el que se ofreció una disculpa, desafortunadamente no fue dentro de los parámetros que la propia Comisión planteó y por esa razón es que no se puede dar por cumplida. Esperamos, pues, que haya una actitud en ese sentido favorable de la Jefatura de Gobierno y que podamos dar por cumplido ese punto y todos los demás de la Recomendación.

P: ¿Cuáles son esos parámetros que tendría que cumplir?

LGP: Hay unos criterios que se establecen desde la Comisión para que la disculpa pública pueda ser considerada como tal, por ejemplo el reconocimiento de la violación, el que estén presentes todas las y los peticionarios. Se trata de un criterio de justicia restaurativa. Entonces, no implica simplemente hacer una declaración pública, sino que se trata de hacer un acto de comunicación. El acto de la disculpa pública es la parte que se ve, pero detrás de ese acto de disculpa pública hay o tiene que haber un proceso de comunicación que implica que se reconocen tanto quien fue víctima de la violación como quien fue perpetrador, para que la disculpa tenga de verdad efectos como restauración.

P: ¿En cuanto a la queja que puso la familia de Celia Lora qué ha pasado? ¿Sigue o qué sucedió?

LGP: Sigue en investigación, no tengo datos sobre un avance significativo todavía en el caso. Muchas gracias.