Boletín 21/2010
28 de enero de 2010
La práctica del sistema penal mexicano está hecha para producir delincuentes, aseveró el Presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis González Placencia, y lamentó que actualmente, pese a la discusión de la reforma penal constitucional, esté lejos de cumplir con sus propósitos de juzgar y reinsertar.
Al inaugurar la Mesa Redonda “Experiencias regionales sobre la prisión preventiva en el contexto de la Reforma Procesal Penal en México”, el Ombudsman capitalino subrayó que los temas de la prisión preventiva y de la reforma penal constitucional son prioritarios para la CDHDF.
“En el país hemos vivido una desafortunada conjunción de parroquialismo jurídico, que es la idea de que lo que se hace en México es de vanguardia y que no debe ser vulnerado por otras ideas, con la práctica del sistema penal mexicano hecha para producir delincuencia”, señaló.
En la Mesa Redonda convocada por la CDHDF, el Centro de Estudios de Justicia de las Américas (CEJA); la Open Society Justice Initiative; Institución Renace, A.B.P. y el Instituto para la Seguridad y Democracia (INSyDE), González Placencia dijo que el resultado más inmediato es la evidente sobrepoblación de las cárceles en el país.
En el Distrito Federal, advirtió, la sobrepoblación supera el 100% de la capacidad: “Tan sólo uno de los reclusorios capitalinos concentra una población de 10 mil presos, cantidad similar a todas las personas que habitan la ciudad de Oñati, España. Así de dramáticas son las cosas”, lamentó.
Al respecto, explicó que la prisión preventiva resulta ser hoy “una suerte de castigo anticipado”, agravado ahora por las limitaciones de la discusión de la reforma penal constitucional, sobre el tema del arraigo: “Que es como la prisión preventiva de la prisión preventiva”, dijo.
En tanto, el Director de Programas de la Open Society Justice Initiative, Robert Vanerik, se refirió a que los resultados de la reforma en México dependen de la manera en que se implementaran los cambios en la práctica, concretamente en lo que se refiere a la figura de la prisión preventiva, a la que calificó como controvertida.
Vanerik celebró el avance de la discusión de la reforma penal en México y celebró los logros en estados como Chihuahua y Oaxaca. Sin embargo, advirtió: “El cambio en la justicia no se obtiene sólo a través de un nuevo código o con una constitución; no basta legislar y después esperar pasivamente”.
Los resultados de una reforma de justicia, explicó, se obtienen cuando se pone en práctica y dependen de cómo y qué tanto se difundió y se explicó su implementación, entre los actores judiciales y entre todo el pueblo.
Dijo que en el debate se ha insistido mucho en temas como el de la oralidad de los juicios, pero poco sobre la práctica y operación de la prisión preventiva: “Es El momento donde se va a ver si realmente existe la capacidad de poner en marcha la reforma y de sostenerla”.
Por su parte, el Director Ejecutivo del Centro de Estudios de Justicia de las Américas (CEJA), Cristián Riego, dio la bienvenida a todos los participantes a laMesa Redonda y señaló que el de la prisión preventiva es, sin duda, el tema más complejo y más crítico dentro del proceso de la reforma de justicia penal.
Entre los objetivos de la Mesa Redonda están los de presentar y debatir los resultados de investigaciones acerca del impacto de la Reforma Procesal Penal en el uso de la prisión preventiva en los sistemas reformados a nivel América Latina y de México.
Con ese propósito, el método de mesa redonda servirá como plataforma de debate e intercambio entre expertos sobre la aplicación de la prisión preventiva y medidas cautelares, abordando los retos y posibles soluciones en el contexto de la reforma penal mexicana.
La Mesa Redonda se dividió en tres paneles: el Panel I, sobre “El Impacto de la Reforma Procesal Penal en el uso de la prisión Preventiva en América Latina”, el Panel II, sobre “La Experiencia en el Uso de la Prisión Preventiva en los Estados Mexicanos que han realizado una Reforma Procesal Penal”, y el Panel III, sobre “Los Desafíos para la Reforma Procesal Penal en México y el Uso de la Prisión Preventiva: Hacia una Agenda de Trabajo”.